21. La confesión

Esta noche tampoco ha podido dormir bien… ahora que el capnonauta no está, pensaba que podría dormir por las noches y no haría falta salir tanto… para pasar insomnio salía más a menudo de lo normal… mejor de fiesta que quieta en la cama…

La desazona el recuerdo de lo que pasó... La noche de fiesta en que se resfrió, subiendo las escaleras… la puerta estaba abierta… Entró y lo vio ahí tendido, envuelto en la humareda, con sus cabellos extendidos, como un Cristo falleciente sin los brazos de su madre... le sacó una foto genial, captaba perfectamente la esencia del personaje, lo retrataba en una única imagen, difuminada tras el humo… luego, perdió la cámara….

Sentada en el sofá intenta recordar dónde la dejó, cuándo fue la última vez que la tuvo entre las manos… Ayer fue al locutorio a conectarse a internet y, después, a pasear con un amigo porque no podía pegar ojo… ¿se le cayó por la calle, entonces?... La llevaba tanto como las gafas y por eso no se da cuenta si la tenía o no, porque se supone que no es algo prescindible sino inmanente…

Suena el timbre, abre la puerta maquinalmente y ve la foto en la pantalla líquida de su cámara digital… Le piden explicaciones con una brutalidad inesperada que la arrebata de su burbuja… se siente tan indefensa en el mundo que su piel se congela, su cuerpo se ovilla y rompe a llorar confesando su historia insignificante…

#fragmento segundo#

Ya sabes que es lo que quieres, lo has sabido siempre y siempre has topado con lo mismo: el miedo. Porque si sabes la teoría no lo pones en práctica, por falta de voluntad, falta de ganas, miedos, temores, angustias, dejate de historias, sabes perfectamente que eres capaz de volar, de mover cielo, mar y montañas cuando te lo propones. Solo de ti sacas una pequeña parte del sentimiento que guardas y asi solo consigues que te queme, te quema quema porque hay algo enorme que quiere salir y se lo impides, y lo retraes, y ya casi no te queda fuerza, es agotador, una lucha sin cuartel en el que el unico perdedor eres tu; ¡BASTA, SE ACABO! Deja que fluya, no tengas miedo, no busques mas excusas para retenerlo, excusas baratas de mierda que te impiden madurar, olvidate del mundo sin dejar de respetarlo, olvidate de tu gente sin dejar de quererlos y centrate en ti, en tu vida y deja brotar lo que escondes, y que pase lo que tenga que pasar, sin prisa pero sin pausa, ya no te encierres mas, pues es la unica manera de llegar a la felicidad.




3 comentarios

Madame Blavatsky dijo...

sencillamente, una caracterización genial. me encanta, responde por completo.

aún nos queda por resolver el misterio de la muerte, pq creo que todos sabíamos que la lomógrafa no era una asesina...

A ver si lo descubre ya Dedé...

Anónimo dijo...

Hombre, es que S es mucha S.

Une oeuvre inimitable, n'est-ce pas?

Madame Blavatsky dijo...

sí, desde luego.

Ahora me ha dado pena verla llorando en el sofá... poretica...