cK se despierta, en otra cama, en otra habitación… e intenta recordar…
Mucho tiempo sin tocar para nadie… en casa, ensayando… un correo electrónico… desplazamiento, alojamiento y comida… Conocer a alguien nuevo, crear un nuevo vínculo a través de la música, no cejar en el intento… Aceptó…
El lugar resultó ser un déjà vu, no supo bien por qué… en el recibidor, la sonrisa del tipo que permaneció el resto de la velada estirado en un sofá lleno de ropa sucia, en un salón con olor a tabaco y hierba, junto a una cocina atestada de platos sin fregar… Era asqueroso pero, curiosamente, el tipo era suficientemente agradable para hacer olvidar las circunstancias… de cena hubo pizza… en un rincón, había una silla reservada, pero sólo estuvieron ellos dos y un pequeño gato romano que, cuando no los miraba comer, se apoyaba en el cristal de la ventana y contemplaba petrificado las sombras de la calle…
Aquella noche la música fluyó sin obstáculos… el auditorio pareció fundirse, licuarse… Después de tanto tiempo, fue sanador volver a ofrecer un concierto… se sintió libre y a gusto consigo mismo… Gracias…
Hablaron sólo un poco, el cansancio del viaje… El tipo le indicó, un pasillo, este dormitorio… la cama, sábanas limpias y blancas, el único mueble de la habitación… recuerda que tuvo la sensación de haber entrado en otra casa, que se durmió rápidamente…
Pero también puede recordar que se ha despertado muchas otras veces en este cuarto… hubo un segundo y un tercer concierto geniales esperando al oyente de la silla vacía… pasaron los días, hablaban, bebían, fumaban… el hombre muchas veces decía cosas inconexas, otras, impulsado por una especie de embate de adrenalina, imprecaba iradamente contra todo y, en parte, no le faltaba razón…
¿Cuánto tiempo ha pasado?...
Al salir lo ve todavía echado en el sofá, inmóvil… se acerca
y no respira...
Mucho tiempo sin tocar para nadie… en casa, ensayando… un correo electrónico… desplazamiento, alojamiento y comida… Conocer a alguien nuevo, crear un nuevo vínculo a través de la música, no cejar en el intento… Aceptó…
El lugar resultó ser un déjà vu, no supo bien por qué… en el recibidor, la sonrisa del tipo que permaneció el resto de la velada estirado en un sofá lleno de ropa sucia, en un salón con olor a tabaco y hierba, junto a una cocina atestada de platos sin fregar… Era asqueroso pero, curiosamente, el tipo era suficientemente agradable para hacer olvidar las circunstancias… de cena hubo pizza… en un rincón, había una silla reservada, pero sólo estuvieron ellos dos y un pequeño gato romano que, cuando no los miraba comer, se apoyaba en el cristal de la ventana y contemplaba petrificado las sombras de la calle…
Aquella noche la música fluyó sin obstáculos… el auditorio pareció fundirse, licuarse… Después de tanto tiempo, fue sanador volver a ofrecer un concierto… se sintió libre y a gusto consigo mismo… Gracias…
Hablaron sólo un poco, el cansancio del viaje… El tipo le indicó, un pasillo, este dormitorio… la cama, sábanas limpias y blancas, el único mueble de la habitación… recuerda que tuvo la sensación de haber entrado en otra casa, que se durmió rápidamente…
Pero también puede recordar que se ha despertado muchas otras veces en este cuarto… hubo un segundo y un tercer concierto geniales esperando al oyente de la silla vacía… pasaron los días, hablaban, bebían, fumaban… el hombre muchas veces decía cosas inconexas, otras, impulsado por una especie de embate de adrenalina, imprecaba iradamente contra todo y, en parte, no le faltaba razón…
¿Cuánto tiempo ha pasado?...
Al salir lo ve todavía echado en el sofá, inmóvil… se acerca
y no respira...
5 comentarios
Vaya, la historia avanza por otros derroteros...
ciudadano Koln ha entrado en escena..
un gato que parece aquel que hizo sus necesidades en cierto sofá (líquidas). Je, je.
olor a hierba, un tipo incoherente... me suena el escenario...
;)
sí si!
A qué suena tan sucio escenario?
Nos tienes intrigadísimas, recogiendo fragmentos para hacer historias...
cK, apoltronado en una mullida butaca con ruedas, va resiguiendo con sus ojos, llorosos, la cadena de palabras que deciden ante él cuáles van a ser sus próximos pasos.
Está cansado y muerto de sueño –ha estado todo el día en casa, ensayando, mirando el correo–, pero le gusta lo que lee. Le hace sonreir.
cK se siente feliz porque sabe que allí, en cualquier sitio y aunque sea lejos, siempre le va a esperar con un juego de sábanas blancas.
Diosmio, esa es tu cocina?!?! O_O
Joder, cuánta mierda junta!! Y los pisers creíamos que nuesro pisucho daba asco...
muahahhahahahha
el capnonauta la está liando...
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